Ahora que te has ido por cinco días,
fumaré todos los cigarros que desee,
en donde quiera. Prepararé bisquets
y los comeré con jalea y tocino grasoso. Pan.
Seré indulgente conmigo. Caminaré por la playa si ello me place.
Y en eso estoy, solo y pensando acerca de cuando era joven. Las personas que me amaban más allá de la razón por entonces.
Y de cómo yo los amé por encima de todos los demás.
Con excepción de alguien.
He dicho que haré todo lo que quiera
mientras tú estés lejos. Pero hay algo que no haré.
No dormiré en nuestra cama si tú no estás aquí.
No. No me interesa hacerlo.
Dormiré en donde me salga de adentro—
en donde mejor duermo cuando tú no estás y
no puedo tomarte como acostumbro hacerlo.
En el sillón roto de mi estudio.
—Raymond Carver.
(Traducción de Carlos LM)

Raymond Carver, 1984. Foto de Bob Adelman/Corbis